Normalmente, el orden de las tres marcas premium alemanas en el mercado nacional está más o menos cimentado: Mercedes está en cabeza, seguida de BMW y Audi. Aunque BMW lleva años liderando las cifras de ventas mundiales, en Alemania no ha habido forma de eludir a los suabos.
En diciembre de 2010, sin embargo, BMW y MINI, con 23.593 unidades, se sitúan claramente por delante de Mercedes y Smart, que juntos suman 20.654 unidades y se sitúan, por tanto, justo por detrás de Audi, con 20.750 vehículos vendidos. Mientras que Audi aumentó un 31,7% y BMW un 16,9%, tanto Mercedes (-0,5) como Smart (-11,4) están por debajo de las cifras de diciembre del año anterior.
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Aún no sabemos a qué se debe la relativa debilidad de Mercedes en diciembre. En cualquier caso, cabe suponer que la situación general en Alemania no ha cambiado y que el pedido de diciembre es una excepción.
Un vistazo a las cifras de 2010 en su conjunto da una idea de ello: Mercedes y Smart, con un total combinado de 310.309 unidades, están claramente por delante de BMW y MINI (266.729) y de la filial de VW en Ingolstadt, Audi, que cuenta con 226.872 unidades. BMW fue el único de los tres fabricantes premium alemanes que superó la cifra del año anterior. El aumento del 3,4% es manejable, pero a la vista del descenso del 23,4% en el mercado global es bastante notable.
Como es habitual, las cifras globales aún no están disponibles y deberían llegarnos en el transcurso de la próxima semana. Por supuesto, entonces informaremos de cómo ha ido diciembre y todo el año 2010 en los demás mercados.