La mascota del radiador de todos los Rolls-Royce es mundialmente famosa y tiene una historia llena de acontecimientos. Desde hace 100 años, el Espíritu del Éxtasis guía los modelos de la marca, por lo que 2011 es algo muy especial para Rolls-Royce. También para nosotros el aniversario es una buena ocasión para echar un vistazo a la historia de la marca, pero antes queremos informar sobre las novedades, como de costumbre.
Todos los Rolls-Royce Ghosts y Phantoms construidos en Goodwood en 2011 llevarán una inscripción apropiada en fuente ITC Willow en la base de la figura en honor del centenario: Spirit of Ecstasy – Centenary 2011. También habrá un desfile de 100 coches modernos y clásicos por Londres el 6 de febrero, fecha en la que Charles Sykes matriculó el vehículo para conmemorar el centenario. El desfile pasará también por lugares como Berkeley Square y Conduit Street, con los que Rolls-Royce mantiene una relación especial.
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Torsten Müller-Ötvös (CEO de Rolls-Royce Motor Cars): «El Espíritu del Éxtasis es quizá el icono más famoso del automovilismo, que adorna la parte delantera de los modelos históricos y actuales de Rolls-Royce. Sirvió de inspiración a los fundadores de nuestra empresa, así como a generaciones de propietarios y entusiastas. Hoy, su imagen sigue inspirando e impulsando a quienes tienen la suerte de trabajar para esta marca, que fabrica los automóviles más exclusivos y deseados del mundo.»
Pero pasemos a la historia del Espíritu del Éxtasis, que, por supuesto, está estrechamente relacionada con la historia temprana de la empresa. Las personas más importantes aquí son Charles Rolls, Henry Royce y Claude Johnson.
A principios de siglo, Charles Rolls dirigía un negocio de importación de automóviles cerca de Earls Court. Sin embargo, no estaba satisfecho con la calidad de los vehículos procedentes del extranjero, por lo que buscó a un hombre con los conocimientos necesarios y finalmente lo encontró en Henry Royce. Éste era ingeniero y dirigía entonces una fábrica de automóviles en Manchester.
Los dos hombres fueron reunidos en 1904 por Claude Johnson, por lo que a veces se le denomina el guión de Rolls-Royce. Era miembro activo del Motor Club of Great Britain y había trabajado con Charles Rolls desde 1901. También se encargó de que a la joven empresa no le faltaran éxitos; sobre todo en los primeros tiempos, el marketing era la clave del éxito y aquí los buenos contactos de Johnson con los editores valían su peso en oro.
En uno de los primeros anuncios de Rolls-Royce, Johnson promocionaba los coches bajo el título «El mejor coche del mundo», que fue adoptado por la prensa especializada y que aún hoy se dice de los vehículos de la marca. Otro ayudante importante para la joven marca fue John Scott Montagu, que fundó la revista The Car Illustrated en 1902 y contrató para ella al artista Charles Sykes en 1903.
Sin embargo, quizá la persona más importante en el camino hacia la creación del Spirit of Ecstasy fue Eleanor Thornton. Al principio fue secretaria de Claude Johnson en el Motor Club de Gran Bretaña, pero luego también apoyó a John Scott Montagu, gracias a lo cual trabajó en la misma empresa que Charles Sykes y llegó a conocerle.
En aquella época también se puso de moda decorar el frontal del vehículo con figuras a veces extrañas, lo que llevó incluso a la empresa a hacer una declaración oficial rechazando esta mala costumbre. Para hacer frente a figuras como policías con sobrepeso, ahora se trataba de diseñar una figura propia.
Aquí es donde Eleanor Thornton -supuestamente- vuelve a entrar en juego, ya que con su belleza y sus maneras ocasionalmente provocativas se había convertido rápidamente en una fuente de inspiración para Charles Sykes.
Es cierto que Charles Sykes diseñó el hoy mundialmente famoso Spirit of Ecstasy, pero nadie sabe con certeza si Eleanor Thornton fue realmente la modelo. Tras su muerte, Sykes nunca habló públicamente de Eleanor, que murió en 1915 en un viaje a la India a bordo del SS Persia, hundido por un torpedo. Es posible que hablara con su hija Josephine, pero ésta, al ser preguntada, se limitó a decir: «Eleanor era una persona encantadora». Es una historia interesante (que ella fuera el modelo para el Espíritu del Éxtasis) y si te hace feliz, el mito permanecerá».
Sin embargo, también es posible que Claude Johnson aprovechara la situación para crear un mito en torno a la figurita del radiador y obtener así un mayor efecto publicitario. A día de hoy, cada figura es única porque se sigue utilizando un proceso de cera perdida en el que se pierde el modelo. Así pues, es seguro que cada Rolls-Royce es único ya por el Espíritu del Éxtasis, si se da el caso de que dos clientes elijan una configuración idéntica a pesar de las casi infinitas posibilidades de individualización.
El Espíritu del Éxtasis también tiene algo de tragedia, ya que su miembro fundador, Charles Rolls, nunca llegó a ver la figura en uno de los vehículos: fue el primer inglés que murió en un accidente aéreo en 1910.